Mutantes
El demonio, una bestia alada enorme, es conocido entre los habitantes del metro como una de las criaturas más letales. Con un aspecto similar a una grotesca ave de presa, esta criatura puede agarrar a los humanos en el suelo y soltarlos desde alturas muy elevadas.
Con unas articulaciones salientes, garras aterradoras y dientes amarillos, el vigilante es una de las criaturas más habituales en el Moscú posapocalíptico. Se mueven en manadas y acechan en todas las calles y túneles, pero no son tan peligrosos si se los caza de uno en uno.
Un vigilante solitario no es rival para un Espartano entrenado, pero sus centinelas pueden pedir refuerzos rápidamente si no se acaba con ellos de forma expeditiva y silenciosa...